martes, 28 de septiembre de 2010

Presidentes "de película"

La política en clave de representación, la puesta en escena de un cuerpo que que quiere ser símbolo de algo que le queda grande. Las mangas de la chaqueta le cubren las manos, le pesan las orejas, le cae la comisura de la boca y los ojos le rebosan.
¿Quién puede discutir las lágrimas de alguien? Pero qué grande es la puesta en escena, dichosa empatía que no nos deja ver el fondo del escenario.

Karzai en la representación de "No sin mi hijo"




Bush durante una ceremonia póstuma de entrega de la Medalla de Honor a los familiares del soldado, Michael Monsoor, que murió al lanzarse sobre una granada acto que salvó la vida de tres de sus compañeros. Escena de "Malnacido 4 de julio"




Berlusconi llora en el Parlamento de Israel cuando el mandatario Benjamín Netanyahu recordó cómo la madre de Berlusconi ayudó una niña judía durante la Segunda Guerra Mundial. Debut dil cavalieri en "Mamma mia!"



Clinton en "El show de Clinton"




Lula en "Goodbye Presidente"

lunes, 13 de septiembre de 2010

La estela del político


¿Por qué la comunicación política presta tanta atención a la imagen y los gestos de los candidatos? Al margen del contenido del discurso, inconscientemente nuestra atención se centra en la manera en la que ese cuerpo se expresa: gestos, expresiones, tono…la disposición que cada uno de nosotros percibimos.
Por casualidad, Giacomo Rizzolatti descubrió a través de un experimento con un mono macaco, que existían unas neuronas especializadas en detectar la actividad del que tenemos enfrente y reproducir mentalmente dicha actividad. Mediante éstas, tenemos constancia de “cómo funciona la vida”. Aprendemos a identificar los comportamientos y los interiorizamos. Las neuronas espejo nos permiten estar conectados con el mundo mediante la comprensión de nosotros mismos a través de los otros.
Las neuronas espejo nos hacen buscar ejemplo en los demás. ¿Y qué buscamos en lo políticos si no es “que den ejemplo”? ¡Cómo no vamos a asociar esto al político si está dirigiendo el país! La verdad es que nos lo ponen difícil... Pero ellos lo saben, saben que el electorado busca identificación en ellos. ¿Cuestión de identidad? No sólo somos palabras, no sólo somos cuerpo, somos la eclosión de todo eso en movimiento. Esa gracia que cada uno tiene y está más allá de todo entrenamiento (si bien este puede hacer casi milagros). Algo así como la capacidad de ser percibido empático. Algo más allá de lo puramente descriptivo, la estela que resta cuando uno desaparece.
¿Tendrá esto que ver con el talante de Zapatero?